Frankenstein se ha convertido en una de los símbolos más recurrentes en la celebración de Halloween y en todo un personaje universal. Por eso, en este post vamos a hacer una bolsa para caramelos de halloween al más puro estilo Frankenstein.
Frankenstein surgió de la pluma de la escritora inglesa Mary Shelley en 1818 y se hizo aún más célebre y popular gracias al cine y la televisión. Desde hace mucho tiempo, no hay Noche de Brujas en la que no se vea a un niño o adulto disfrazado de Frankenstein o en la que su reconocible figura no decore algún lugar.
Y cómo no, nosotros queremos aportar nuestro granito de arena conviertiéndo botellas de plástico en espeluznantes bolsas para caramelos de Halloween con la forma de la inconfundible cabeza de Frankenstein, ¡o incluso de una calabaza!
Materiales para nuestras bolsas para caramelos de halloween
- 2 botellas de 1,5L
- Cúter y tijeras
- Spray negro y verde
- Goma eva y rotu permanente
- Pegamento fuerte
- Una cremallera
- Troqueladora
- Y un lazo.
Cómo hacer nuestra bolsa de chuches para halloween
Comenzamos cortando la primera botella a unos 4 cm de la base. La segunda botella la cortaremos por la mitad.
La botella más grande (la segunda) la pintamos con spray verde y la más pequeña con spray negro. Aprovecha y pinta también los tapones de las dos botellas de negro.
Con la ayuda de la troqueladora, u otra heramienta que te sirva para este paso, haz dos agujeros que queden a la misma altura de la botella verde. Utiliza estos agujeros y pasa un lazo por cada uno de ellos, anudándolo en la parte interior de la botella (así no se verán). El lazo debe ser lo suficientemente largo para que le sirva a los más peques para llevarlo colgado.
¡Ya es hora de hacer la cara de nuestro Frankenstein! Para las orejas-torillos, pega los dos tapones negros debajo de los agujeros por los que has pasado el lazo, puedes usar pegamento de contacto fuerte o pegamento caliente.
Para hacer los ojos, puedes pintarlos en un trozo de goma eva, recortarlos y pegarlos o pintarlos directamente en el plástico con un rotu permanente. Ahora sigue dándole la personalidad que quieras dibujándole cicatrices, boca, arrugas, ¡tu frankenstein personalizado!
Para poner la tapa superior (la botella pequeña y negra), corta una cremallera larga para que coincida justamente con el perímetro de la botella y añade pegamento textil en el anverso, a lo largo. Colócala por el interior de la botella, de forma que ambos extremos se unan en la parte trasera de Frankenstein.
Cuando esta cremallera esté seca, abrela cremallera y repite la operación con la parte superior. Trabajar con ella abierta te facilitará los movimientos a la hora de pegar.
¡Y ya tendríamos nuestra bolsa de caramelos de Halloween lista!
¿Qué os parece el resultado? ¡A nosotros nos encanta! Es una idea fantástica para recoger los caramelos de Halloween y reutilizar nuestros envases de plástico. Además, podemos crear montones de bolsitas como está de nuestros personajes de miedo favoritos. ¿Qué tal una calabaza? ¿Y un fantásma?
Si queréis ver cómo hacer esta manualidad paso a paso, os dejamos el vídeo de Bezoya con la explicación:
Siguiendo los pasos especificados en el vídeo y gracias a El tarro de las ideas, obtendremos una divertida cabeza de Frankenstein en la que podremos guardar y transportar gominolas, bombones, caramelos… para intercambiar y regalar durante nuestra Fiesta de Halloween.
¿Qué os parecen nuestras manualidades de Halloween? Decorar para esta fiesta es la excusa de reciclaje perfecta para que los niños se diviertan, perfeccionen sus habilidades y valoren las excelentes posibilidades que presentan los envases para ser reutilizados.
Sigue visitando nuestra sección amarilla para encontrar mil y una formas más de reutilizar tus envases domésticos. Por supuesto, recuerda depositar tus envases en el contenedor amarillo tras su uso.